Y le echas
la culpa al tiempo,
dices que
todo tiene su momento y su lugar,Pero eres incapaz de ver el sufrimiento del otro,
sólo te limitas a dar la vuelta, no mirar, no das la cara,
pasas de largo y haces como si nada pasara,
el dolor es ajeno a tu mirada.
Y si te preguntan del dolor ajeno dirás no saber nada.
Y les mirarás llorar y sufrir,
pero no te inclinarás para darle la mano,
no se inclinara la balanza, dirás que es ajeno a ti,
y con eso enjuagarás la conciencia.
Y pasará el tiempo, ese tiempo que todo lo cura en silencio,
en medio de la nada.
Pasaran las agujas del reloj marcando las estaciones,inviernos, primaveras, veranos y esos otoños vacíos,la ausencia de las hojas de los árbolesy verás pasar el amor que tanto añorabas,y seguirás sin tener motivos para limpiar tu conciencia,dejarás de la mano del tiempo aquello que has negado una vez very renegarás de la verdad,de tu crueldad, aunque se te desgarre el alma.
Aquel tiempo transitado donde había alegríay no entendías ni querías ver la felicidad que respirabas,y así lo dejabas y el tiempo salió de tu vida rompiendo cada uno de los relojes.Sólo era cosa del tiempo decías.
Y el amor muere con tu locura
y tú morirás por darle la espalda,
morirás a pesar de que podías detenerle,
pero era mejor darle la espalda y dejar que el tiempo lo silencie,
ya no me queda nada, cantos de río, ni salitre de mar,
no habrá aroma de rosas, ni espinas que te hagan sangrar.
Los bosques secos, sin árboles que den sombray nada que oxigenar, sin poder respirar,ni peces de río, ni peces de mar,pájaros con alas rotas, sin nido, pájaros malheridos,nada tiene sentido ya, nada es como antes,sin nadie que te acurruque en sus abrazos,ni besos que besar, ni caricias que acariciar,por todo ello ¡Yo te maldigo! añoro todosy cada unos de tus besos.
Ya no descansas a mi lado, al otro lado de la cama,Estrechándome contra tu pecho desnudo,y me negaste, a pesar del dolor que eso le ha causado a tu alma, -Alma solitaria, alma sin sentimientos,sin haber alcanzado la felicidad,mis manos deshabitas están,ya no puedo ofrecerte nada,echaré una última mirada al pasadoy al recuerdo de aquel tiempo nuestro lleno de amoresy me alejaré sin resentimiento,a lo lejos se escuché el débil murmullo del latir de tu corazón,no quiero añorarte, tampoco juzgarte,por todo ello ¡Yo te maldigo! cómo dices tú,eso es cosa del tiempo,
Y el tiempo pasó, dejando tus huellas de un paso endebley solitario, tu cuerpo ya frágily tu piel marchitada por los años,el dolor clavado en tu corazóny con gran amargura has debilitado y lapidado tu alma.Y seguirás diciendo, es cosa del tiempo,cuando el tiempo aquí no juega nada¡Has sido tú, sólo tú!y ese tiempo que todo cura en silencio,en medio de la nada, te habrá abandonadoy morirás por darle la espalda.
0 Responses
Publicar un comentario
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)