Deseo morirme dulcemente al sentir
Que cuando me tomas, estoy dentro de ti
Saborear cada segundo de placer
Tu amor mi vida me hace enloquecer
Recorriendo despacio todo tus laberintos de pasiones
Explorando cada uno de sus rincones
Acostumbrándome a ti, sin prisas, despacio
Llenándome plenamente de tu ser
Embriagándome de tu aroma, respirando
Y acariciando tu piel, desnudos sentir el recorrer
De los impulsos del amor y perder el control
Y perdernos entre los abrazos y besos totalmente liberados
Amarte, tenerte, sentirte
¡Es tal el amor sublime que sonríe mi alma!
Y desgarrador el grito de alegría saliendo del corazón
“Suspiros del alma guardados por los dos”
Descubriendo los momentos de gran pasión
Cubriéndolos con mis besos y excitados los deseos
Llegando hasta la cumbre de la dicha
Dejándome llevar sin control, me pierdo entre tus brazos
Y me cobijo ansiando tus necesarias caricias de amor
Y el deseo de tu cuerpo al complementarme en ti.
Ya no son sueños, llenos de amor
Y de sensualidad a flor de piel
Son tantos los anhelos, que nos entregamos, despacio
Saboreando cada uno de los amores
Derrochando placeres saliendo
Por los poros de nuestros cuerpos
Rozando la perfección
Sumergidos sin poder contener nuestros sentimientos
Sin hablar y en silencio, nuestros gozos y alientos
Serán los que le pongan voz al verbo amor
Tatuando mi cuerpo con tus besos y caricias
Invisible velo que para siempre permanecerá
Imborrable en mi sentimiento y morirme de amor
Al alcanzar tan deseado amor alimentado por los dos
“Suspiros del alma guardados por los dos”
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