6/11/2011
Mí querido Fernando:
Ya sé que te gustaría otro tipo de carta más alegre, que te dijese todo va bien amigo, y que no te gusta nada que este siempre triste, pero es mucho más fácil alcanzar una estrella, que el amor verdadero, ya sabes que estas fechas me angustian por la falta de mi padre y otras cosas que solo los dos sabemos, parece que son como si el diablo viniera a traerme malas noticias y ya van muchas por tales fechas, veras lo que me ha pasado esta vez;
fui a una cena, cuatro mujeres y cuatro hombres, hice como siempre que salgo, me arregle, estrene un vestido ya que eran fechas de fiesta y bueno me apetecía, y marche para pasar una velada inolvidable, así que entre en el restaurante fue algo que jamás olvidare, ellos embobados y ellas parecían hienas, sus caras me dieron miedo, pero ya no había marcha atrás, me senté en una esquina y me decían ven siéntate a mi lado, eso los chicos y ellas empezaron con el sarcasmo más vulgar y rastrero jamás oído, y se armo el lio, uno de ellos me llamo pija y se lio parda, yo no tenía la culpa de ser más alta, más joven y todo hay que decirlo mejor tipo y cara, para mi desgracia le ganaba con creces, si llego a tener cinco años menos me sirven de menú las carroñeras, aguante el tipo que para eso lo tengo y hice oídos sordos, ¡maldita cena! –Más tarde el mejor partido de todos, al ir a la discoteca, dijo al llegar a su coche abriendo la puerta del copiloto, siéntate por favor, y una de ellas le recrimino ¡oye ese es mi sitio! Me quise cambiar y el dijo que en su coche mandaba él, es más a ella no la dejo subir, le dijo que te lleve otro. Al llegar a la discoteca estaba muy incómoda mi yo me decía “pírate ya” pero él me agarro de un brazo pidió mi consumición y me separo del resto, de las víboras y de un amigo de mano larga, y paso la noche llena de malas formas, tomaron unos tragos y con ellos llegaron las faltas de respeto y envidia que envolvía el ambienté haciéndolo hostil, quería quedarme y a la vez salir pitando, pero él era tan amable, y recordar cómo nos conocimos y habernos encontrado después de tanto tiempo me pudo, nos conocíamos desde la infancia, sus padres y los míos eran compadres y me quede para que de esa única noche que me vieron las hienas hicieran de mi vida un infierno, amenazas, insultos, humillaciones, hasta llegar a poner por tierra mi relación con el chico de mi infancia, solo hice llorar, no quise enfrentarme a nadie, ni pedir explicaciones, fui cobarde y además no soy así, no sería de levantarle la voz a nadie, ni insultar ni pegarme como ellas solían hacer, y siguieron hablando de mi a pesar de solo verme esa noche al saber que yo salía con mi chico, hasta hoy que mi vida dio un giro grandísimo, y lo que parecía un cuento de hadas se transformo en un infierno, un mes en una casa de salud, ya sabes que desde el accidente sufro de crisis asmáticas y un disgusto las agudiza ya que son de crisis de ansiedad, me llevaron a urgencias ya cuando estaba entrando en estado de shock, solo hicieron falta las amenazas por parte de una de ellas y el pánico se apodero de mi cuerpo, aun no he podido olvidar y sigo mortificándome por cargar una pena, que como siempre otro me regala. No sé cómo explicarte que lloran mis ojos y ahora lo hace mi alma, no sé cómo decirte que me cuesta de la cama levantarme, cada día es más duro y se hace constante, casi perdí las ganas de vivir, apenas necesito alimento, ya con poco me sustento, mi cuerpo quiere luchar, pero no ve la posibilidad de ganar, las palabras son solo palabras, las verdades salen del alma, como me dices que siga para adelante, si tú dices que prefieres ahogarte y dejar que la vida te desgaste, es como si yo delante de ti me cortase las venas y te dijera, ¡Oye la vida es bella! ya verás como alcanzas tus sueños, nunca los pierdas, el amor no tiene palabras, tiene hechos y para mi es lo único que me vale, a veces dices cosas y me dañas y me arañas, te cuento mi vida, si así se le puede llamar, pero llevo toda mi vida derrotada y esperando amor y al final me duele el alma por verme que nadie supo apreciar mi amor, que paso desapercibido, que me usaron todo lo que han podido para después tirarme sin un átomo de piedad. Siempre deje yo las relaciones, pero te juro mi querido amigo que era porque ya había dejado llenar el vaso tres o cuatro veces, he hecho lo posible y perdone lo imperdonable, di amor y me llenaron de palos, di caricias mientras por mi boca salía sangre, que nadie me diga que no he luchado ya que he sido una guerrera, pero con amor, cariño, abrazos nunca he ganado una guerra, con pensar en positivo para atraer lo bueno. Buenos, sueños, esperanzas, ilusiones, siembra amor y recogerás amor, “Quien siembra borrascas recoge tempestades” Solo Dios sabe, solo él, toda mi vida me la pase regalando amor, poniendo sonrisas, ayudando siempre que pude y aun sin poder, todo me ha superado, nunca entro en líos, paso, y no sabes de lo que es capaz de hacer la gente por envidia, un toque de maldad y por creerse superior, no sabes lo que me han hecho, ni lo entenderías, porque ni yo misma lo entiendo, acabe mal el año y este lo va a superar, aun no sé porque nadie pidió perdón, porque nadie tenía razón, aun no sé por qué tanta maldad, para hacerme tanto daño, y quería una explicación que jamás llego y ahora pillaría un vuelo a ninguna parte, o mejor me dormiría hasta el 2 de Enero y asunto zanjado. Y cuando lo pienso, siento pánico cuando no se bien lo que a ocurrir. Esta vida llena de inmoralidad, envidia, rencor, vanidad, orgullo y vicio. Me despido mi querido amigo y espero que tu si seas mucho más feliz que yo, pienso que no me merezco esa dicha y que de alguna forma alguien siempre se cruza en mi vida, derrochando desdicha y atravesando mi alma al dolor más ingrato de donde ya no veo luz y en manos del pánico.- Besos como siempre.-
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