Arturo rey de el paraíso de los celtas en Camelot
reunió a sus caballeros más valientes
y los sentó alrededor de la tabla redonda.
Les enseño a combatir el crimen, la crueldad a ser misericordiosos,
a no mentir, respetar y proteger a las mujeres.
Pero uno de sus caballeros (Lancelot)
le falló, engañándole con su esposa Ginebra.
Morgana la reina hechicera de temibles poderes hermanastra del rey Arturo
tenía el don de saber todo lo que pasaba en el reino de Camelot.
Los caballeros luchaban contra los dragones
en los bosques sombríos y jardines mágicos.
A su regreso contaban todas sus hazañas.
Pero los caballeros no respetaban a las damas de la corte
tal y como su maestro el rey Arturo les había inculcado;
mancillando así a las damas de dicha corte.
El trovador hablaba de los amores entre poemas y cantos
de una bella dama leyendo entre cantos su carta: Soy una dama de la corte,
que espera fielmente el beso de su caballero, soy la durmiente que sueña,
Pues en mis sueños siempre como tal se presenta,
ahora a la corte ya no llegan tus cartas y el silencio es cruel.
Siento que tengo el alma rota, que no hay ya forma de reparar tanto dolor,
apenas puedo respirar sin que me duela,
y mi sangre dentro, quema mis venas.
Quiero dormir el sueño eterno, ya que vivir así no vale la pena,
no hay medicación para los corazones rotos solo un mar lleno de lágrimas negras.
Es bien cierto que el verdadero
y primer beso de amor se da con el "alma" al par que con la mirada,
ni un roce, solo con la fuerza del corazón,
ese será el beso que jamás podrás olvidar
y día a día alimentará la verdadera paz del “Sentimiento del alma”.
Mi caballero se bate en guerras alejado de mi cama
y siento que dormiré el sueño eterno,
y en mi otra vida cuando despierte se borre la huella del amor
que quema mi alma ya la pena al fin libere mi alma para siempre,
soy la durmiente que sueña esperando el beso de su caballero
y ser por fin despertada; y la bella y frágil dama se durmió para siempre.
Enfadada la hechicera Morgana que se sentía humillada
al ser rechazada por el caballero Lancelot,
quiso vengarse de él y a la par devolver el honor de la bella dama
lanzando un conjuro maldiciéndolos y les envió al “Valle sin retorno”
y amenazó al resto de los caballeros, cogeré mi caballo blanco
y me adentraré en los bosques sombríos
y jardines mágicos donde dice el caballero
que los dragones se comen las “garzas reales”
y alzaré la espada de Excalibur reclamando fidelidad a mí hermano
y reparar la honra de la bella dama.
Mi hermano, el rey Arturo, herido de muerte descansa en la Isla de Avalón
custodiado por las cuatro reinas hadas
hasta que dé con el hechizo y la pócima mágica
que lo devuelva al mundo de los mortales.
Quedáis avisados caballeros se por donde lucháis
y las fiestas paganas a las qué vais; conozco cada sitio,
cada lugar y si quiero montaré mi caballo blanco
y me personaré, no soy cobarde y si queréis nada se me pondrá por delante.
Cuidaros bien las espaldas ya puede que en cualquier momento
con la espada del rey os toque sin guante.
Y os envié al “Valle sin retorno”.
(Mis sueños con el reinado de Arturo)
0 Responses
Publicar un comentario
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)